17 de agosto de 2006

El Maromo me ha hecho sospechar que es probable que alguien piense que lo escrito en este blog es una gran paranoia de mi invención, y eso que apenas me ha dado tiempo de destripar miga. Así que antes de convertirme en la mejor dramaturga del siglo XXI debo advertir modestamente que todo lo que se publica en este blog es verídico y que, dentro de los márgenes del humor, intento ajustarme lo más posible a la realidad. No me estoy inventando personajes. Los bisteks sangrientos y las brasileñas existen, afortunadamente. Y me alegra causar la impresión de que mi vida no puede ser cierta pero lamentablemente mi imaginación no puede compararse con el nivel de paranoia que alcanzan las historias reales. Y como el comentario me puso contenta me he tomado la molestia de escanear un comic profundo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario